La parcela entrará en el Registro Municipal de Solares, tras la retirada de la licencia de construcción que tenía concedida desde 2008
Un total de 32 propiedades forman parte de la bolsa de terrenos sin urbanizar
La historia del hotel previsto en la parcela de la calle Granada abre un nuevo capítulo. La Gerencia de Urbanismo iniciará esta semana el trámite para declarar la caducidad de la licencia de obras concedida en 2008 a la promotora Salsa Inmobiliaria, una vez que ha vencido el último plazo dado para presentar la documentación que este organismo le exigía para obtener la prórroga. Esta decisión tiene importantes repercusiones, ya que es el primer paso para la inclusión de los números 59 y 61 de esta céntrica vía en el Registro Municipal de Solares, la medida más contundente que puede poner en práctica el Ayuntamiento para obligar a los propietarios a edificar.
El concejal de Urbanismo, Francisco Pomares, puso de relieve que, a falta de las últimas comprobaciones, todo apunta a que la propiedad no ha entregado los anexos que les solicitaron, dos informes relativos al cumplimiento de las últimas medidas de protección contra incendios, que deberá contar con el visto bueno del servicio de Bomberos. Así como de la justificación de que el nuevo inmueble cumple la ley y la ordenanza municipal sobre accesibilidad.
«Ya se les dio una prórroga, así que han tenido tiempo suficiente», comentó el edil, y desglosó los pasos siguientes: en primer lugar, el consejo de Urbanismo aprobará la caducidad del permiso de construcción; incluso, en función de la capacidad de los técnicos, se pretende que se pueda ver ya en la próxima reunión de este organismo, a finales de este mes. Los titulares pueden entonces recurrir la decisión administrativa. Concluido este trámite, el terreno pasará a engrosar el Registro Municipal de Solares, lo que supondrá el inicio de un plazo de un año para obtener una nueva licencia de obras, conseguir la financiación e iniciar la construcción. En última instancia, si no muestran ningún interés por revertir la situación, el Consistorio tendría potestad para sacarlo a subasta pública. Pomares reconoció que esto supone «un toque de atención», pues se ubica en un entorno especialmente sensible de la ciudad, en pleno corazón del circuito turístico y monumental. Este periódico intentó ayer sin éxito recabar la opinión de la empresa.
Una década de trámites
De este modo, culmina el procedimiento que arrancó en diciembre del año pasado, cuando la empresa hizo una solicitud para prorrogar la última licencia de obras, que data del año 2008. El proyecto ya se enfrentó a un expediente de caducidad a finales de 2011, contra el que Salsa recurrió. El que en su tiempo iba a ser el primer cinco estrellas de la capital arrancó oficialmente en 2003, con la presentación del primer proyecto básico, que dio lugar a una licencia para la rehabilitación del conocido como palacio del marqués de la Sonora, o de los Gálvez. A finales de 2006 fue derruido, tras un derrumbe accidental durante las obras. Hoy en día solo queda la fachada sujeta con andamiaje, el zaguán y el portón barroco. El cambio de rehabilitación a obra nueva suscitó un cambio de proyecto y la obligación por parte de la Delegación de Cultura de hacer excavaciones arqueológicas. Estos dieron lugar a la aparición de restos romanos, que postergaron aún más si cabe el inicio. En febrero del año pasado se produjo el último paso, cuando la promotora presentó un complementario con ajustes del diseño, tales como la eliminación de la piscina que iba en la cubierta del edificio.
La Gerencia Municipal de Urbanismo ha incluido ya 32 propiedades en el Registro Municipal de Solares, por lo que podrían ser subastadas si sus propietarios no actúan de forma inmediata. Además, tiene localizados otros 23 que pertenecen a propietarios que no han iniciado las obras o se encuentran paralizadas, generalmente de promociones afectadas por la crisis.
La parcela entrará en el Registro Municipal de Solares, tras la retirada de la licencia de construcción que tenía concedida desde 2008
Un total de 32 propiedades forman parte de la bolsa de terrenos sin urbanizar
La historia del hotel previsto en la parcela de la calle Granada abre un nuevo capítulo. La Gerencia de Urbanismo iniciará esta semana el trámite para declarar la caducidad de la licencia de obras concedida en 2008 a la promotora Salsa Inmobiliaria, una vez que ha vencido el último plazo dado para presentar la documentación que este organismo le exigía para obtener la prórroga. Esta decisión tiene importantes repercusiones, ya que es el primer paso para la inclusión de los números 59 y 61 de esta céntrica vía en el Registro Municipal de Solares, la medida más contundente que puede poner en práctica el Ayuntamiento para obligar a los propietarios a edificar.
El concejal de Urbanismo, Francisco Pomares, puso de relieve que, a falta de las últimas comprobaciones, todo apunta a que la propiedad no ha entregado los anexos que les solicitaron, dos informes relativos al cumplimiento de las últimas medidas de protección contra incendios, que deberá contar con el visto bueno del servicio de Bomberos. Así como de la justificación de que el nuevo inmueble cumple la ley y la ordenanza municipal sobre accesibilidad.
«Ya se les dio una prórroga, así que han tenido tiempo suficiente», comentó el edil, y desglosó los pasos siguientes: en primer lugar, el consejo de Urbanismo aprobará la caducidad del permiso de construcción; incluso, en función de la capacidad de los técnicos, se pretende que se pueda ver ya en la próxima reunión de este organismo, a finales de este mes. Los titulares pueden entonces recurrir la decisión administrativa. Concluido este trámite, el terreno pasará a engrosar el Registro Municipal de Solares, lo que supondrá el inicio de un plazo de un año para obtener una nueva licencia de obras, conseguir la financiación e iniciar la construcción. En última instancia, si no muestran ningún interés por revertir la situación, el Consistorio tendría potestad para sacarlo a subasta pública. Pomares reconoció que esto supone «un toque de atención», pues se ubica en un entorno especialmente sensible de la ciudad, en pleno corazón del circuito turístico y monumental. Este periódico intentó ayer sin éxito recabar la opinión de la empresa.
Una década de trámites
De este modo, culmina el procedimiento que arrancó en diciembre del año pasado, cuando la empresa hizo una solicitud para prorrogar la última licencia de obras, que data del año 2008. El proyecto ya se enfrentó a un expediente de caducidad a finales de 2011, contra el que Salsa recurrió. El que en su tiempo iba a ser el primer cinco estrellas de la capital arrancó oficialmente en 2003, con la presentación del primer proyecto básico, que dio lugar a una licencia para la rehabilitación del conocido como palacio del marqués de la Sonora, o de los Gálvez. A finales de 2006 fue derruido, tras un derrumbe accidental durante las obras. Hoy en día solo queda la fachada sujeta con andamiaje, el zaguán y el portón barroco. El cambio de rehabilitación a obra nueva suscitó un cambio de proyecto y la obligación por parte de la Delegación de Cultura de hacer excavaciones arqueológicas. Estos dieron lugar a la aparición de restos romanos, que postergaron aún más si cabe el inicio. En febrero del año pasado se produjo el último paso, cuando la promotora presentó un complementario con ajustes del diseño, tales como la eliminación de la piscina que iba en la cubierta del edificio.
La Gerencia Municipal de Urbanismo ha incluido ya 32 propiedades en el Registro Municipal de Solares, por lo que podrían ser subastadas si sus propietarios no actúan de forma inmediata. Además, tiene localizados otros 23 que pertenecen a propietarios que no han iniciado las obras o se encuentran paralizadas, generalmente de promociones afectadas por la crisis.
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