miércoles, 8 de enero de 2014

Los proyectos de nuevas viviendas apenas llegan a 904, el nivel más bajo en 50 años (La Opinión)

El visado de promociones cayó en 2013 un 20,3% por la falta de créditos bancarios – Sólo se proyectaron dos edificios de VPO

08.01.2014 | 05:00
La promoción de viviendas está en un mínimo histórico.
La promoción de viviendas está en un mínimo histórico. 

El sector de la construcción en Málaga está tocando suelo. Las 904 viviendas que fueron visadas por el colegio Oficial de Arquitectos en 2013, para iniciar su construcción en los próximos meses, es el nivel más bajo de los últimos 50 años. Además, una parte importante de ellas son casas unifamiliares y pequeñas promociones, en su mayor parte destinadas al alquiler. Se acabaron las grandes urbanizaciones y proyectos de gran envergadura. La
construcción está para pocas alegrías y la razón hay que buscarla en la falta de créditos.
La caída experimentada en 2013 viene a confirmar que todavía no se había alcanzado el suelo en el sector, algo que parece que ya ha llegado. De hecho, el frenazo en la bajada en el visado de nuevos proyectos que se experimentó en 2012, con un descenso de sólo un 4,6% y 1.134 viviendas proyectadas, se ha revelado como un espejismo. El batacazo del año pasado ha sido de un 20,3%, cuando parecía difícil promover menos viviendas en una provincia como Málaga.
Estos datos son además una mala noticia para el sector de la construcción a medio plazo, ya que entre 2011 y 2013 apenas se han presentado proyectos para construir 3.200 viviendas. Esto supone que la actividad de las constructoras y la creación de empleo en este sector va a tener que esperar varios años, ya que los proyectos que se han visado en estos últimos tres años terminarán de ejecutarse para 2016, como muy tarde, y apenas hay perspectivas de que se presenten nuevos proyectos con una carga de trabajo importante.
La construcción se mueve así en niveles de actividad de hace medio siglo, con descensos abrumadores de hasta el 80% y el 90% en toda la Costa del Sol, donde ningún constructor o promotor se atreve a visar ningún nuevo proyecto hasta que no se termine de vender el stock de viviendas que mantiene taponado el mercado.
El descenso en la presentación de nuevos proyectos de viviendas se ha agravado además a lo largo del año, siendo más acusado a partir del tercer trimestre del año, pasando de las 344 y 314 viviendas visadas en los dos primeros trimestres, respectivamente, a poco más de un centenar en los dos últimos trimestres de 2013. De hecho, el tercer trimestre del año (julio-septiembre) registró uno de los peores datos históricos en la provincia, con sólo 110 viviendas visadas.
En cuanto a las VPO, apenas ha existido actividad en la construcción de nuevas viviendas públicas, con sólo dos promociones de 146 viviendas y un presupuesto de 11,1 millones de euros a lo largo de 2013 y en la capital. La falta de crédito bancario para las administraciones está detrás de la paralización de estas promociones, frente a los 13 proyectos del año 2012 en cinco municipios de la provincia.
De hecho, uno de los grandes problemas de las administraciones a la hora de promover viviendas públicas es obtener dinero de los bancos para iniciar nuevas promociones, pero también se ha cortado el grifo crediticio a los adjudicatarios de viviendas públicas para su compra. Esto ha motivado que las administraciones empiecen a optar por las viviendas públicas en alquiler, visto la gran cantidad de renuncias que se han producido en los últimos años.
No están mucho mejor las promociones de viviendas libres, que también muestran el desplome de la actividad inmobiliaria. Sirva como muestra que en más de una veintena de municipios de la provincia donde sólo se han presentado menos de cinco proyectos de viviendas unifamiliares.
Si tomamos un poco de perspectiva, la actividad de la construcción acumula descensos del 73% respecto a 2009 y del 98% respecto a 2006, en pleno auge del boom inmobiliario y dos años antes de que el sector se hundiera.
En municipios como Casares o Manilva el freno ha sido en seco, pasando de promover más de 1.000 viviendas en 2006 a quedarse en 3 y en 1 vivienda en 2013, respectivamente. En la capital la caída ha sido continuada también desde 2006, al igual que en la mayoría de los municipios de la Costa, aunque con un leve repunte en Marbella.

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