martes, 18 de junio de 2013

Urbanismo estudia cubrir el fondo del río y mejorar la limpieza de los lodos (Málaga Hoy)

La solución puede estar lista esta semana, después de lo cual se adoptará una decisión sobre cómo poner coto a los malos olores
SEBASTIÁN SÁNCHEZ MÁLAGA | ACTUALIZADO 18.06.2013 - 01:00
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Desembocadura del río Guadalmedina.

La reapertura del debate sobre el modo de solucionar el ya eterno problema de malos olores en la desembocadura del río Guadalmedina, cuando ya parecía definitivamente cerrado, sigue quemando etapas. Los técnicos de la Gerencia de Urbanismo, en concreto del departamento de Arquitectura, trabajan desde la semana pasada en una propuesta alternativa a la diseñada por la Empresa Municipal de Aguas (Emasa), que consistiría en cubrir el fondo de la parte final del cauce con una capa de hormigón. Una acción que permitiría mejorar las condiciones de limpieza del fondo. 

Esta maniobra, según explicaron desde el organismo, podría ser una respuesta al escollo que presenta en la actualidad este tramo, puesto que los lodos acaban acumulándose en el lecho fluvial, conformado por escolleras, lo que dificulta su retirada completa. El interrogante principal, es ¿cuánto costará? Y es precisamente a dar respuesta a esa cuestión a la que se dedican los operarios encargados de la tarea, según explicó el coordinador general de Ordenación del Territorio y Vivienda, Diego Maldonado, que confió en que esta misma semana se disponga de un análisis detallado sobre el que adoptar una decisión. 

El propio alcalde, Francisco de la Torre, confirmó este extremo y subrayó la necesidad de fijar una posición, dadas las molestias que padecen los residentes de la zona. Si bien está a la espera de conocer los resultados de los estudios técnicos, asumió que muy probablemente se imponga la propuesta de Emasa por tratarse de una opción menos onerosa desde el punto de vista económica y que podría materializarse este mismo verano. Ello, bien es cierto, después de que la semana pasada asegurase que prefería mantener la lámina de agua en ese tramo del río. 

La redacción de este proyecto alternativo, de menor envergadura que otro que llegó a ponerse sobre la mesa municipal hace varios años y que suponía un coste de 2,5 millones de euros, sale adelante después de que Urbanismo rechazase la intervención planteada por Emasa, que supone enterrar con tierra, piedras y hormigón la parte final del cauce, donde actualmente hay una lámina de agua. 

La negativa de Urbanismo se produjo incluso después de que el propio De la Torre avalase inicialmente la solución de la Empresa de Aguas a finales del pasado mes de abril, cuando el equipo de gobierno del PP aprobó varias modificaciones de expedientes de crédito para disponer de los fondos necesarios con los que ejecutar la actuación. Esa obra, de escasa envergadura y que apenas se prolongaría un par de meses, está estimada en 414.000 euros. 

Al tiempo, el revés tiene lugar cuando Emasa había incluso abierto el procedimiento para la contratación de la obra, como constaba hasta la semana pasada en su página web. Hasta ayer mismo el anuncio, en el que se fija la posible presentación de ofertas hasta el 1 de julio próximo, se mantenía activo en este portal. Conforme a los datos, se fija un mes de plazo para la redacción del proyecto constructivo y dos para la ejecución de los trabajos. Algo nada baladí, por cuanto es necesario acomodar las labores de actuación al periodo de apertura de la presa de El Limonero. 

Lo ocurrido esta última semana, con nuevos cambios de criterio por parte del alcalde, viene a sumarse al fracaso ya constatado de la no pocas acciones llevadas a cabo por el Ayuntamiento para poner fin al hedor que mana de la parte final del río. La más significativa de todas las intervenciones ejecutadas data de 2004, cuando Emasa ya trató de liquidar el problema mediante un sistema de bombeo de agua de mar desde el Puerto hasta unas bocas junto al Centro de Arte Contemporáneo (CAC), con el que facilitar el movimiento del líquido y el aumento de la concentración de oxígeno en la zona con agua. 

El escollo es que cuando la marea baja, el sistema de captación de agua se queda sin suministro, las bocas dejan de funcionar y el hedor vuelve. Según los datos municipales, sólo el consumo eléctrico del mecanismo supone unos 50.000 euros anuales. Cifra que se puede ir a los 115.000 euros si se incluye la gestión global, a lo que añadir lo aportado en la limpieza del fondo. De hecho, las actuaciones que Emasa tiene que llevar a cabo prácticamente cada año para retirar el lodo del fondo de este tramo supone un gasto añadido de unos 140.000 euros.

Piden acelerar los trámites para abrir las dos mezquitas de calle Agua (La Opinión)

Urbanismo respalda la moción de IU sobre las dos únicas mezquitas funerarias de la España islámica

18.06.2013 | 05:00
Restos del cementerio musulmán de la calle Agua.
Restos del cementerio musulmán de la calle Agua.
La Comisión de Urbanismo aprobó por unanimidad una moción de Izquierda Unida que pide al Ayuntamiento y a la Junta de Andalucía acelerar los trámites para abrir al público cuanto antes las dos mezquitas funerarias, utilizadas durante los siglos XI al XV, que se encuentran en los bajos de la calle Agua, 22 y que son las dos únicas de este tipo que se conocen en la España musulmana. Como puntualizó a este diario el coordinador general de Urbanismo, Diego Maldonado, la moción se aprobó con una enmienda del PP para dar también traslado de la moción al Área de Comercio, «ya que por la Gerencia de Urbanismo ya tiene desde hace tiempo la licencia de primera ocupación y falta la apertura del Área de Comercio».

Urbanismo rechaza proteger la laguna de Soliva pese a los vecinos (La Opinión)

El PP no apoya una moción conjunta de IU y PSOE porque no le ve valor medioambiental

18.06.2013 | 05:00
Vecinos y miembros del PSOE y de IU en la laguna de Soliva el pasado 27 de mayo.
Vecinos y miembros del PSOE y de IU en la laguna de Soliva el pasado 27 de mayo.
La comisión de Urbanismo celebrada ayer rechazó una moción conjunta de PSOE e IU que pedía la protección de la nueva laguna de Soliva, nacida en el otoño-invierno de 2009 a 2010 a causa de las intensas lluvias en una antigua cantera de arcilla, en terrenos propiedad de dos inmobiliarias malagueñas.
En concreto, la moción conjunta solicitaba «instar a las áreas competentes del Ayuntamiento de Málaga, que mediante el diálogo y el acuerdo adopte las medidas oportunas para la conservación de la Laguna de Soliva, como un espacio verde y humedal».