jueves, 3 de noviembre de 2011

Urbanismo elude presupuestar para 2012 ingresos de los grandes convenios (Málaga Hoy)


Sólo incorpora 23,6 millones ya cobrados y que no se han podido utilizar hasta ahora
SEBASTIÁN SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 03.11.2011 - 01:00
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Infografía del proyecto de las torres de Repsol.

La caja de ingresos procedentes de los grandes convenios urbanísticos firmados por el Ayuntamiento de Málaga al albur del nuevo Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de la ciudad estará mucho más vacía en el presupuesto municipal de 2012. Según pudo saber Málaga Hoy de fuentes municipales, la previsión que hoy se maneja en la Casona del Parque es que las cuentas del ejercicio próximo sólo incluyan 23,6 millones de euros ya cobrados de los acuerdos de los antiguos suelos de Repsol y Martiricos, dejando a cero el capítulo procedente de nuevas aportaciones de estos dos convenios y del relativo a La Térmica. 

Ésta es, a día de hoy, la previsión con la que trabajan los responsables municipales, justo en la recta final de la elaboración del presupuesto para 2012. El planteamiento choca de lleno con lo ocurrido el año pasado, cuando el equipo de gobierno del PP introdujo en el documento más de 152 millones de euros procedentes de acuerdos urbanísticos (para una inversión total de 238 millones), a pesar de que era notoria la imposibilidad de que las empresas involucradas en estas operaciones abonasen cantidad alguna. 

De hecho, desde la entrada en vigor del planeamiento de la capital de la Costa del Sol, a finales de agosto, tanto Caixanovagalicia (valedora del proyecto de las torres de Repsol), como Espacio y Unicaja (Martiricos) y Endesa (La Térmica) tendrían que haber pagado ya al Consistorio 70 millones de euros, sin que ello haya tenido lugar hasta el momento. 

El camino por el que ahora opta el gobierno local, enseñado el pasado 17 de octubre por la concejala de Economía, Carolina España, que aseguró que cara a 2012 se iba a ser "más moderado" en las previsiones, es consecuente con la incertidumbre que sigue pesando sobre la disponibilidad económica de estas firmas a aportar las cuantías comprometidas. Esto se suma al mantenimiento de las negociaciones que Urbanismo mantiene con las empresas desde hace meses y que aún no ha permitido rubricar los nuevos documentos. 

Las fuentes consultadas apuntaron, en este sentido, que el plazo que se da el equipo de gobierno para cerrar estos acuerdos es noviembre o principios de diciembre, momento en el que se deberá conocer con exactitud el plazo que se da a cada una de las promotoras para pagar las cantidades comprometidas a cambio de los derechos edificatorios y si éstas sufren variación a la baja por la modificación de los valores del suelo, puerta abierta por Urbanismo hace algunas semanas. 

Los algo más de 30 millones de euros a pintar en los presupuestos próximos se corresponden con 12 millones del acuerdo de Repsol, ingresado en caja desde hace meses pero que no podía ser usado por la inexistencia de un estudio acústico que sí estará disponible para la anualidad que viene, y otros 11,6 millones también percibidos por parte de los promotores del proyecto de Martiricos y pendientes de la aprobación del plan especial del sector, en la recta final. Es decir, que el equipo de gobierno sí puede manejar este dinero para actuaciones concretas, tales como las futuras fases del bulevar sobre el soterramiento del AVE o la construcción de viviendas de protección oficial. 

¿Qué ocurrirá con el resto de los dineros de los grandes acuerdos? Esa es la duda que queda por resolver antes de que finalice la anualidad, puesto que las cuantías pendientes de ingresar tras la aprobación definitiva del Plan General por este trió de actuaciones se eleva a unos 140 millones. Según los datos aportados el pasado Pleno municipal por el concejal de Urbanismo, Diego Maldonado, en 2011, su departamento ha ingresado unos 33 millones procedentes de diferentes acuerdos urbanísticos, incluyendo entre los mismos los del Cine Andalucía; Sánchez Blanca (del que queda una parte pendiente de cobro en 2017); Bahía Málaga (habrá otros pagos en 2012 y 2013), Gas Natural (otro cobro más en 2012), Maristas; Málaga Wagen; Hipercor, y Hoyo de Esparteros.

Premios a futuros arquitectos (Málaga Hoy)

Dos proyectos de estudiantes malagueños han obtenido, en sus diferentes modalidades, los dos primeros Premios de la Fundación Detea, que este año cumple su décima edición y que están dotados con 3.000 euros y un periodo de prácticas en esta empresa. Inmaculada Navarro Gaspar, estudiante malagueña de la Escuela Superior de Arquitectos de Granada, logró el primer premio en la modalidad de edificio industrial con un proyecto denominadoAdherencia, consistente en la "rehabilitación del polígono industrial de Los Guindos de Málaga, a través de equipamientos y espacios públicos, que son las principales carencias de la zona". 

La estudiante, que afirma que llevaba bastante tiempo pensando en presentarse al concurso, diseñó un proyecto que pretende recuperar el potencial industrial de Málaga: "A raíz de mi investigación, descubrí que a finales del siglo XIX y principios del XX Málaga fue la segunda potencia industrial de España. Yo creo que esta es una forma de recuperar esa memoria que a pesar de que es reciente está olvidada. Andalucía, en general, tiene interés industrial, pero su potencialidad en este campo está eclipsada por el turismo y la agricultura". De esta forma, Inmaculada se centró en el polígono industrial Los Guindos, actualmente inmerso en el tejido residencial de la ciudad. "Mi intención es llegar a integrar el tejido industrial y residencial de esta zona, que puedan coexistir, y apostar por no desmantelar el polígono". 

En cuanto a la modalidad de rehabilitación de antiguos espacios industriales, que este año planteaba la transformación de la Central Térmica de Corrales en Aljaraque (Huelva) en un Centro de I+D+i de Regeneración de Áreas industriales, el primer premio fue para el trabajoInsección, compuesto por Alberto Montiel Lozano, David Belmonte García y Pedro de la Torre Prieto, también estudiantes de Arquitectura de la Universidad de Málaga.

Pleno malagueño en Arquitectura (La Opinión)


Dos proyectos de estudiantes consiguen el primer premio de la Fundación Detea al fomento de la Arquitectura






Inmaculada Navarro, estudiante malagueña de Arquitectura, en el polígono de Los Guindos.
Inmaculada Navarro, estudiante malagueña de Arquitectura, en el polígono de Los Guindos.  La Opinión
ALFONSO VÁZQUEZ Un grupo de futuros arquitectos de Málaga ha copado los primeros premios al fomento de la Arquitectura de la Fundación Detea, que este año cumple su décima edición. Los premios, que persiguen el acceso al mercado laboral de los alumnos de las escuelas de Arquitectura y de las Ingenierías Industrial y de Caminos, están dotados con 3.000 euros y un periodo de prácticas en esta empresa.

En la modalidad de edificio industrial ha vencido Inmaculada Navarro Gaspar, estudiante malagueña de la Escuela Superior de Arquitectos de Granada, con el proyecto Adherencia, la «rehabilitación del polígono industrial de Los Guindos de Málaga, a través de equipamientos y espacios públicos, que son las principales carencias de la zona».

La estudiante, que confesó que llevaba bastante tiempo pensando en presentarse al concurso, diseñó un proyecto que pretende recuperar el potencial industrial de Málaga: «A raíz de mi investigación, descubrí que a finales del siglo XIX y principios del XX Málaga fue la segunda potencia industrial de España. Yo creo que esta es una forma de recuperar esa memoria que a pesar de que es reciente está olvidada. Andalucía, en general, tiene interés industrial, pero su potencialidad en este campo está eclipsada por el turismo y la agricultura», indicó.

De esta forma, Inmaculada se centró en el polígono de Los Guindos, integrado en Málaga. «Mi intención es llegar a integrar el tejido industrial y residencial de esta zona, que puedan coexistir, y apostar por no desmantelar el polígono», señaló.

El jurado destacó que se trataba de una «sugerente y adherente investigación sobre los tejidos productivos de Málaga», resaltando además el compromiso académico de esta propuesta.

En la modalidad de rehabilitación de antiguos espacios industriales, que este año planteaba la transformación de la central térmica de Corrales en Aljaraque (Huelva) en un centro de I+D+i de regeneración de áreas industriales, el primer premio ha sido para el trabajo Insección, presentado por Alberto Montiel Lozano, David Belmonte García y Pedro de la Torre Prieto, estudiantes de Arquitectura de la Universidad de Málaga.

El injerto
Los jóvenes abogaron por conservar al máximo la estructura del edificio para que no perdiera la identidad y, como explicó Alberto Montiel, «surgió la idea de usar una especie de injerto que evocaba la apariencia que el edificio tenía antes, al mismo tiempo que permitía darle un nuevo uso», que según los requisitos para el proyecto, debía contemplar espacios comunes y de convivencia para los usuarios.
El jurado describió ese «injerto» como «una interesante estructura geométrica injertada en la arquitectura industrial y una inteligente gestión del vacío». Para estos futuros arquitectos, el premio es una buena oportunidad para entrar en el mundo laboral.