lunes, 29 de agosto de 2011

Multas a 787 dueños de edificios históricos de Málaga (La opinión)

El mal estado obliga a realizar obras de mejora en 612 inmuebles que no han superado la inspección


Todos los edificios antiguos están obligados a pasar una inspección para comprobar su estado de conservación.
Todos los edificios antiguos están obligados a pasar una inspección para comprobar su estado de conservación. Arciniega

MIGUE FERRARY Cuatro años después de que se implantara la Inspección Técnica de Edificios (ITE), 787 propietarios de edificios históricos tienen una sanción de la Gerencia Municipal de Urbanismo por no comprobar el estado de sus inmuebles. Esta cifra supone el 28% del total de los edificios anteriores a 1931 incluidos en las dos primeras campañas de inspección y que incluyó a 2.804 bloques.

Las sanciones que se enfrentan los propietarios que no cumplieron con la inspección puede ascender a 3.000 euros, además de acometer las obras que sean necesarias para asegurar el buen estado del inmueble.

De los 787 expedientes abiertos por Urbanismo, la mayor parte corresponde a edificios anteriores a 1906, que tienen un mayor valor patrimonial y suelen presentar mayores daños. Así, 551 de los 2.073 inmuebles más antiguos de la ciudad no tienen el informe que acredite que son habitables. Esta cifra es, no obstante, inferior al inicio del proceso sancionador, ya que 74 propietarios realizaron el informe que les requería el Ayuntamiento de Málaga al comenzar el expediente de la multa.

La segunda campaña de la ITE que se cerró, para aquellos inmuebles construidos entre 1907 y 1931, afectó a 731 edificios. De ellos, 453 presentaron la documentación requerida y 236 obviaron este trámite, engrosando la larga lista de sanciones en marcha.

Una de las principales consecuencias de esta campaña es el inicio de las actuaciones de mejora en aquellos inmuebles que no superaron la ITE por detectarse un mal estado de conservación. La Gerencia Municipal de Urbanismo destaca que la mayor parte de los problemas detectados se encuentran en fachadas y cubiertas, y en menor grado en las instalaciones eléctrica y de saneamiento o en la estructura.
Al menos 612 edificios tuvieron una resolución desfavorables sobre su estado de conservación y obliga a sus propietarios a presentar un proyecto de restauración para solventar los problemas detectados en un plazo máximo de tres meses.

En realidad, sólo el 38% de los edificios inspeccionados hasta el momento, ha superado la ITE sin problemas, un 21,8% tendrá que hacer obras, el 28% no ha presentado su informe y un 12,2% ha retrasado la presentación por estar en obras o en ruina.

Inspección en marcha


La Gerencia Municipal de Urbanismo tiene en marcha la tercera campaña de revisión de edificios, que afecta a 7.202 inmuebles construidos entre 1932 y 1956. El plazo que tienen los responsables para presentar sus informes es hasta el 31 de diciembre de este año. A partir de ese momento, se empezarán a abrir los expedientes sancionadores a aquellos que no hayan presentado su informe de inspección.
Por ahora, Urbanismo asegura que se han presentado ya 300 informes, cifra que previsiblemente subirá hasta finales de año.
Para facilitar que se realicen los informes sobre el estado de conservación, el Ayuntamiento tiene una partida de 50.000 euros para subvencionar a las comunidades de propietarios parte de los honorarios del técnico que realice la inspección. El plazo para solicitar la ayuda terminó el pasado 15 de julio, con 159 solicitudes registradas. En las campañas anteriores la ayuda media fue de 416,94 euros por edificio.

Encaje de bolillos para vender VPO (Málaga Hoy)

El IMV, que sigue sin enajenar 102 de los 1.301 pisos sociales sorteados en diciembre de 2006, no descarta bajar el precio de los inmuebles si no encuentra adjudicatarios suficientes en el registro de demandantes

SEBASTIÁN SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 29.08.2011 - 06:54
Al Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) le toca hacer encaje de bolillos para poder dar salida a los 102 pisos de protección oficial que sigue sin vender después de que fuesen sorteados en diciembre de 2006. Transcurridos algo menos de cinco años, más de un centenar de los 1.301 inmuebles objeto de la rifa que el Consistorio organizó en la previa al sorteo de la Lotería de Navidad siguen sin adjudicatario, lo que pone de manifiesto lo convulso de un proceso marcado en sus inicios por las numerosas exigencias demandadas a los solicitantes y lastrado ahora por la negativa de las entidades financieras a asumir las hipotecas que se reclaman.
La realidad que se cierne hoy sobre parte de las casas que quedan vacías en Soliva (unas 70), el mayor barrio de VPO de la capital de la Costa del Sol, y García Grana (una treintena), es que habiéndose cribado la bolsa total de 23.000 personas que optaron al sorteo original, estos inmuebles siguen sin ocupantes. No obstante, la lista de pisos vacíos ha ido disminuyendo a cuenta gotas en los últimos años.
Tras un laborioso proceso de análisis de la documentación de los seleccionados, lo que motivó una amplia exclusión de nombres, quedaron por enajenar unas 300 viviendas a fecha de octubre de 2010. La circunstancia hizo que el Ayuntamiento optase por anunciar una convocatoria global para la totalidad de integrantes de la bolsa de peticionarios. "Lo que les decíamos es que si estaban interesados y tenían capacidad económica para optar a uno de los pisos viniesen a las oficinas del IMV y lo comunicasen", explica José María López Cerezo, gerente del instituto. Un paso que dieron 530 personas.
Pero el deseo se topó, nuevamente, con las exigencias de las entidades bancarias, que echaron para atrás los planes residenciales de más de uno. De estos 300 pisos, sólo se logró la venta de 200, quedando los 102 antes señalados. Incluso, en este escenario, el Ayuntamiento ha flexibilizado en cierto modo las normas, al punto de aceptar 50 solicitudes que se presentaron fuera de plazo y que en este momento están siendo analizadas. "Si se mantiene la proporción de viviendas que se han vendido en procesos anteriores, podemos calcular que de las 102 quedarían aún por vender 80", expone López Cerezo, si bien, potencialmente, este último estadio del proceso podría permitir la enajenación de medio centenar. ¿Qué ocurrirá con el resto? Sobre ello, el gerente del IMV es claro: serán incluidas en el registro de demandantes que hace ya más de un año abrió el Consistorio y que incluye a cerca de 3.000 personas, de los que un millar, aproximadamente, está interesado en VPO en venta.
Será pues este el último reducto del que tirará el IMV para culminar la venta de los pisos de Soliva y García Grana, no descartándose la posibilidad de rebajar los precios de los inmuebles si se superase esta fase sin éxito. Para tratar de allanar el camino, la idea que maneja el organismo es crear un proceso independiente para cada una de las tres promociones de VPO en las que quedan pisos, es decir, una lista para García Grana y otras dos para los dos edificios que restan en Soliva, una solución con la que dirigir más ciertamente a los interesados en cada una de las actuaciones.
Buena parte de la dificultad, admite López Cerezo, reside en que parte de las casas que quedan por vender son las más caras, pudiendo llegar a los 148.000 euros de coste, con unos 90 metros cuadrados. No obstante, tomando como referencia el precio medio de las viviendas pendientes, que puede situarse en 85.000 euros, la hipoteca a 25 años para los compradores se cifra en 387 euros. Es particularmente llamativo el caso de García Grana, puesto que en los cuatro años y medio que han transcurrido desde diciembre de 2006, de los 64 pisos sorteados, sólo han sido vendidos la mitad y ello a pesar de que los precios que se manejan en este caso son bastante asequibles.